Hace unos días me comentaba un cliente en la sesión ….no hay más cosas que me resulten gratificantes porque a todas les sacaría un pero…. no me apetece salir tanto, no me apetece hacer nada la verdad, incluso en ocasiones estoy más cómodo sólo que acompañado…

Al escucharle pensaba de qué forma podría colaborar con él para que su pensamientos, fluyeran hacia contenidos relacionados con la voluntad de aumentar su motivación hacia estímulos gratificantes, o asumiera un mejor control de sus decisiones.

Después de dialogar sobre estas ideas y otras que fueron surgiendo durante el desarrollo de la sesión; identificó una distorsión cognitiva y se planteó como propósito para la próxima sesión, traer a la cita nuevas alternativas de pensamientos más adaptada a su nuevo propósito..

En el siguiente post, pretendemos argumentar la importancia de la voluntad como capacidad para ejecutar y controlar nuestras acciones, al mismo tiempo ilustrar cómo la voluntad mantiene una relación directa con la motivación.

En la orientación cognitivista un punto común en las diversas posiciones es la conceptualización de la voluntad como capacidad ejecutiva y de control del desarrollo de la acción. A su vez, el aspecto receptivo afectivo está acogido en la bibliografía actual, en el ámbito del tratamiento del tema de la motivación. Vázquez, S. (2009) 

Llegados al siglo XX, la psicología de la voluntad va a ser referenciada en la mayoría de investigaciones con la figura de N.Ach. Para este investigador dos son los aspectos a tener en cuenta en el actuar de la voluntad, por una parte la decisión y por otra parte la determinación a actuar (Ach, 1905).

Para comenzar la semana queremos compartir un breve fragmento del "arte de vivir". Su creador fue Epicteto.

Epicteto escribió respecto a la voluntad en este manual de vida, entre muchas otras reflexiones lo siguiente:

Nada puede realmente detenerte. Nada puede detenerte…

Tu voluntad está siempre a tu disposición.

La enfermedad podría desafiar tu cuerpo, pero… tú eres solamente tu cuerpo? Puedes quedar cojo… pero tú eres más que tus piernas.

Tu voluntad no se afecta si tú no dejas que se afecte.

Recuerda esto cada vez que algo te ocurra.

Aunque si quieres una reflexión más Milenial y contemporánea les invitamos a escuchar la siguiente canción y después ya nos comentan que tal...

!Que tengan buen comienzo de semana!

Referencias.

 Ach, N. (1905). Über die Willenstätigkeit und das Denken. Göttingen: Vandenhoeck & Rubprecht.

 Vázquez, S. (2009). Motivación y voluntad. Revista de Psicología, 27 (2), 185-212. 

Naiker Román Céspedes.